Un ejemplo de cómo ocuparse es mejor que preocuparse

Un ejemplo de cómo ocuparse es mejor que preocuparse

Hace poco me llegó una solicitud de información para una sesión individual:

“Hola, me presento a las oposiciones de maestros y estaba buscando algunas sesiones para mejorar mi confianza y discurso. Ya que es una prueba en la que me cuesta controlar los nervios y transmitir mis ideas con claridad…

¿En qué consisten las sesiones?”

Quedamos y a la media hora (las sesiones suelen ser de entre una hora y dos), la mandé para casa.

Llevaba el tema perfectamente preparado.

Hicimos pruebas con distracciones e interrupciones y ella seguía presentando impertérrita.

Le dije:

“No hagas nada más. Solo confía. Eres un ejemplo de cómo cuando algo se nos dificulta, en vez de darle vueltas y más vueltas en la cabeza a todo lo malo que puede pasar, te decides a prepararte, ensayar y buscar ayuda profesional.”

Aunque en este caso no fuera necesario puesto que el trabajo previo había sido realmente bueno y poco podíamos añadir.

De todas formas Ana dijo que le sirvió practicar delante de alguien desconocido y se fue con mucha confianza.

Hace poco me escribió:

“Hola Natalia, soy Ana, hicimos una sesión de coaching para preparar mis oposiciones. Era para decirte que saqué muy buena nota y he conseguido mi plaza!!! Gracias por tu ayuda! Un saludo”

Desde aquí felicitamos a Ana Granizo por su 7,5 y por su plaza.

Si en estos momentos tienes un objetivo en el que la comunicación es importante para alcanzarlo, rodearte de herramientas y profesionales que hagan el camino más corto y seguro puede resultar muy eficaz.

¿Qué necesitas?

Escríbeme y estaré encantada de ayudarte a desarrollar tu potencial de comunicación

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